Zapiain ha vuelto a proclamarse campeona del XXII Concurso de Sidra de Gipuzkoa organizado por la Diputación de este territorio. La histórica bodega de Astigarraga se ha calzado la txapela que la acredita como la mejor de esta edición en un acto celebrado en la sede de la entidad foral que contó con la presencia del diputado general Markel Olano, el director de Agricultura Xabier Arruti y los representantes de las sidrerías participantes en el concurso.
El premio lo recibió emocionado Egoitz Zapiain, tercera generación de la bodega familiar y responsable de producción, quien destacó que “nuestro trabajo consiste en tratar de elaborar sagardoa de la mayor calidad posible en todos los lotes, manteniendo una consistencia y un perfil con el que nos identificamos”. Para ello, “no hay otro secreto que el trabajo diario, pero también es necesaria una buena materia prima, como la que obtenemos de nuestros proveedores de manzana, con quienes quiero compartir este premio”.
En concreto, Zapiain hizo mención al caserío Ezeizabarrena de Tolosa, con cuyas manzanas elaboran una sidra de parcela llamada Joanes de Zapiain, en honor al antepasado de la familia de quien se tiene constancia documental que elaboraba sidra ya en el siglo XVI. Precisamente, esta sidra de parcela recibió una mención especial junto con otras sidras monovarietales, bivarietales, sobre la madre o criadas en barricas de madera de roble.
Para Egoitz Zapiain, “en Euskal Herria tenemos unas magníficas manzanas de sidra que han sido seleccionadas durante siglos, con unas características que nos ofrecen muchísimas posibilidades a la hora de jugar y de elaborar sidras de altísima calidad. Ese es nuestro mayor tesoro, y debemos protegerlo”.
En esta misma línea se expresaron el coordinador de la Denominación de Origen Euskal Sagardoa Unai Agirre y el director de Agricultura Xabier Arruti, quienes han destacado el apoyo ofrecido por la entidad foral para la plantación de nuevos manzanales. Gracias a este trabajo, hoy en día existen más de 500 hectáreas de manzanos de sidra inscritas en el consejo regulador.
CUALIDADES ORGANOLÉPTICAS
Tras conocerse la noticia, desde la bodega de Astigarraga Ion Zapiain no ocultaba su alegría por el premio, y destacaba que “es el reconocimiento a muchos años de trabajo buscando la máxima calidad en el producto. Este trabajo lo inició nuestro abuelo Nicolas Roxario Zapiain, quien construyó la bodega de madera en 1964, apostando por la sagardoa en uno de sus peores momentos históricos. Y le siguieron sus hijos, con mi aita Miguel Zapiain a la cabeza, el primer enólogo del sector de la sidra vasca con una apuesta clara por la calidad, unos valores que hemos seguido trabajando hasta hoy”.
No en vano, en Zapiain tratan de elaborar sidras con un perfil organoléptico muy concreto, en el que priman los aromas y sabores nobles, la limpidez y un carácter afrutado. Esto hace que las sidras de Zapiain sean fáciles de beber, de trago largo y muy agradables para todo tipo de consumidor. Todo ello sin perder la complejidad aromática y el carácter gastronómico que la convierte en la compañera ideal de los mejores platos vascos.
Para preservar dichas cualidades y disfrutarlas en su máxima expresión, este año Zapiain ha incorporado una novedad en sus botellas. A partir de ahora, estas se presentan con tapón de rosca, conocido como tapón pilfer, y un escanciador incorporado en el cuello de la botella. El tapón, además de facilitar la apertura y cierre si la necesidad de herramientas adicionales, conserva mejor las cualidades de la sagardoa mediante un cierre totalmente hermético. El escanciador incorporado, por su parte, permite servir la bebida con precisión desde cierta altura y evita la posible contaminación cruzada ya que es de un solo uso y no es necesario manipular el dispositivo con la mano.
Fuente: Sidrería Zapiain