Las últimas fiestas de vacaciones.
Descripción
Un reportaje de Asier Zaldua - Domingo, 1 de Septiembre de 2019 - Actualizado a las 06:03h Agosto ha llegado ya a su fin, pero esta semana algunos todavía han podido disfrutar de unos pocos días más de relax. El que haya vuelto de vacaciones con ganas de seguir de juerga, ha tenido la oportunidad estos días de acudir a Brinkola.
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Ficha
- Autor: Asier Zaldua
- Fuente: Noticias de Gipuzkoa
- Fecha: 2019-09-01
- Clasificación: 6.7. Pueblos
- Tipo documento: Revistas
- Fondo: Sagardoetxea fondoa »
- Código: NA-009233
Texto completo
Las últimas fiestas de vacaciones
LAS VACACIONES TOCAN A SU FIN. LOS QUE TODAVÍA TENGAN CUERPO DE JOTA, PUEDEN ACUDIR A | BRINKOLA. EN ESTE BARRIO DE LEGAZPI CELEBRAN LAS FIESTAS DE SAN AGUSTÍN
UN REPORTAJE DE ASIER ZALDUA - Domingo, 1 de Septiembre de 2019 - Actualizado a las 06:03h
Agosto ha llegado ya a su fin, pero esta semana algunos todavía han podido disfrutar de unos pocos días más de relax. El que haya vuelto de vacaciones con ganas de seguir de juerga, ha tenido la oportunidad estos días de acudir a Brinkola. En este barrio de Legazpi celebraron las fiestas de San Agustín a partir del miércoles.
Las fiestas comenzaron el miércoles, día del patrón, con una misa en la ermita del barrio seguida de una comida en la sociedad Armuño para los jubilados.
El resto de los actos se han condensado durante el fin de semana. Así, el viernes tuvo lugar el txupinazo y la posterior izada de la ikurriña, y desde entonces los legazpiarras han podido disfrutar con una cena popular, actuaciones de los bertsolaris Joseba Barandiaran, Aitor Esteban y Asier Iriondo y los trikitilaris Agurtzane y Ion Elustondo, y los conciertos de los grupos Browstons y Kontuz Erromeriya, entre otros aenta NÓMINA de ING. La cuenta para tu día a día, que
Las fiestas se dieron por finalizadas ayer, con un concurso de dibujo por la mañana y los campeonatos de bolos y toca y el concurso de tortilla de patata por la tarde. También hubo juegos para los más pequeños de la casa. Además, los legazpiarras pudieron disfrutar de sardinas, txistorra y sidra.
UNA VISITA A BRINKOLA Todos los guipuzcoanos saben de la existencia de este barrio (está en uno de los extremos de la línea de Cercanías de Renfe), pero muchos no han estado jamás allí. Las fiestas de San Agustín son una buena excusa para visitar Brinkola y Telleriarte (su barrio vecino).
En estos dos barrios rurales se pueden contemplar varios monumentos, como Elorregi y el puente de Brinkola. Elorregi es un palacio del siglo XIV, situado junto al cauce del Urola.
En cuanto al puente de Brinkola, no puede competir con el palacio en antigüedad, pero sí en majestuosidad. De hecho, con sus siete ojos y su gran altura, domina el paisaje. En Gipuzkoa hay puentes más largos y más bonitos, pero ninguno es tan grande en relación al lugar en el que se ubica.
El puente grande de Brinkola (también tienen uno más pequeño) se construyó en 1905 para dar servicio a los trabajadores y las empresas de Oñati que utilizaban el ferrocarril. La estación está en una ladera y se veían obligados a bajar, cruzar el río Urola y subir la ladera de enfrente para coger el camino que les llevaba a Oñati. El puente unió la estación con el camino.
El puente es muy largo, pero no hace falta salir de Brinkola para encontrar una construcción con más metros. Se trata del túnel del ferrocarril. Este túnel fue el más largo del Estado español durante 20 años y el más largo de la CAV durante 145. Tiene 2.957 metros y atraviesa Aizkorri. Fue el más largo de la CAV hasta 2009. Ese año le destronó el túnel de Isuskitza, en la autopista Eibar-Vitoria, con sus 3.415 metros. Eso sí, el de Brinkola puede seguir presumiendo de ser el más largo de la línea Madrid-Irun.
DOS MUSEOS En Brinkola y Telleriarte hay también dos museos: el Ecomuseo del Pastoreo en el caserío Erreizabal y el Rincón del Pan en el caserío Igaralde-Goena. En uno los visitantes suelen tener ocasión de hacer queso y dar el biberón a los corderos y en el otro se enseña cómo se hacía el pan en los caseríos.
Además, Brinkola es una de las puertas de entrada al parque natural Aizkorri-Aratz. Y el que no quiera subir cuestas, puede pasear por el embalse de Barrendiola. Fiestas, arquitectura, naturaleza... ¿Quién da más? ¿A qué esperan para visitar Brinkola? Todos los días, una veintena de trenes van de Irun a Brinkola y otros tantos vuelven de este barrio de Legazpi al otro extremo de la línea de Cercanías. Más fácil, imposible.