Sagardoaren lurraldea

Los manzanos han producido pocos frutos debido al caluroso verano

Descripción

Las lluvias de septiembre mejoraron la inquietante situación de la cosecha, que fue “rápida en duración”

sidra manzana

Ficha

  • Autor: Aitor Anuncibay
  • Fuente: Noticias de Gipuzkoa
  • Fecha: 2006-01-12
  • Clasificación: 1.3. Manzana
  • Tipo documento: Prensa
  • Fondo: Sagardoetxea fondoa
  • Signatura: P6-3
  • »
  • Código: NA-009087

Texto completo

ASTIGARRAGA. La sequía “casi
histórica” padecida este verano,
como la califica el representante
de la asociación Sagardun, José
Ángel Goñi, ha provocado que sólo
un 20% de las manzanas usadas en
la elaboración de la sidra en Astigarraga
haya sido cultivada en
suelo guipuzcoano, frente al 55%
de 2004.
La falta de agua ha originado un
bajo rendimiento de los manzanos,
lo que ha obligado a los sidreros ha
importar esa fruta de diferentes
lugares como Asturias o Bretaña
(Francia).
“La cosecha se puede catalogar
como rápida en duración y heterogénea
en cantidad según las
comarcas, a pesar de la sequía, y
compensada por lluvias en septiembre”,
describe Goñi.
Con todo eso, “las primeras
entregas de manzanas significativas
empezaron a principios de
octubre”, de las que se han transformado
en Astigarraga unas 7.000
toneladas, cerrándose los lagares
a finales de noviembre.
Los litros producidos en Euskal
Herria rondan los doce millones,
de los que la mitad tienen como
base de fabricación la propia zona
de Astigarraga.
AROMAS A FRUTA La cata realizada
por Sagardun con la bebida elaborada
en 2005 da una sidra de un
“amarillo pajizo atractivo, con aromas
potentes a fruta madura, con
un perfecto equilibrio entre taninos
y resto de componentes, y con
un final amplio y generoso”.
El aroma, por su parte, se desprende
“más en retronasal que en
nariz, con un bouquet a fruta
madura, al igual que en 2003”,
cuando otra intensa sequía condicionó
la cosecha de manzana en
Euskadi.
Entre las innovaciones introducidas
en la fabricación de la apreciada
bebida se encuentra el proceso
del desfangado, que mejora la
calidad del mosto puesto a fermentar,
al eliminarse “desde el
principio los posos turbios responsables
de defectos durante la
conservación de la botella”.
Respecto a los principales lugares
de venta de sidra guipuzcoana
embotellada, la palma se la llevan
los propios territorios vascos, con
el 90%, aunque existen flujos
comerciales en notable crecimiento
hacia Madrid, Cataluña,
las zonas costeras del Mediterráneo
y el sur de Francia.