El tiempo inestable no frena el auge del turismo en Gipuzkoa
Descripción
Turismo / incremento visitantes / mal tiempo / procedencia de los turistas / restaurantes / hoteles / Aspagi / Donostia / Semana Grande
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Ficha
- Autor: Macarena Tejada
- Fuente: El Diario Vasco
- Fecha: 2014-08-29
- Clasificación: 6.7. Pueblos
- Tipo documento: Prensa
- Fondo: Sagardoetxea fondoa »
- Código: NA-005861
Texto completo
El territorio experimenta un aumento de visitantes extranjeros y estatales «En términos de ocupación, el mes de agosto está siendo muy bueno, hay ocupaciones muy altas», asegura la patronal hotelera. Gipuzkoa se mantiene en la cresta de la ola del turismo. La temporada estival llega a su momento más álgido, pasada la Semana Grande de Donostia, y el balance de visitantes es más que positivo. Ni los últimos coletazos de la crisis ni los escasos días soleados que están caracterizando este verano han espantado a los turistas. Cada vez más ciudadanos extranjeros visitan nuestro territorio, pero no son los únicos. El turista estatal también ha aumentado en lo que va de estío, según las impresiones de hosteleros y responsables de hoteles. «El verano está siendo muy bueno. Estamos como en los buenos momentos de 2006 y 2007», asegura Jesús Ancisar, responsable del restaurante 'Arroka Berri' de Hondarribia. Las fuentes consultadas por este periódico confirman que el verano «va bien, incluso mejor que en temporadas anteriores». Paul Lizeaga, secretario de la Asociación de Empresas Hoteleras de Gipuzkoa-Aspagi, asegura que «en términos de ocupación, el mes de agosto está siendo muy bueno, hay ocupaciones muy altas. De todas formas, es verdad que en julio hubo varias cancelaciones de última hora debido al mal tiempo». El Hotel Codina de San Sebastián goza de estar completo durante esta semana. Fran González, director del establecimiento, declara que, pese a la buena situación en la que se encuentran, no pueden obviar «los problemas que ha habido para vender las últimas habitaciones», ya que, de una manera u otra, el tiempo resulta determinante a la hora de decidir a dónde viajar. Y es que la lluvia no es beneficiosa para ciudades como San Sebastián, donde encontrar un sitio para colocar la toalla en la playa los días soleados se convierte en misión imposible. Los destinos de interior son los que, sin duda, salen airosos los días encapotados. «El mal tiempo hace que la gente no pueda ir a la playa y decida venir a pasar el día a lugares como Goierri. Además, cada vez más gente viene con la intención de descubrir el interior, porque en Goierri están en el centro de Euskadi. A la gente le gusta hacer cosas y por eso hemos creado nuevos productos turísticos para el verano. De esta manera estamos dejando de ser un destino al que la gente viene de rebote», cuenta Nico Osinalde, gerente de la agencia turística de Goierri Goitur. Más turistas extranjeros La llegada de turistas extranjeros destacan también este año. El verano pasado despuntó por un aumento de los visitantes foráneos que ayudó a compensar el descenso de los estatales. Este año la situación es parecida, pero no igual. El sector turístico guipuzcoano asegura haber notado un paulatino incremento del turista estatal que aún se está recuperando de la crisis. «Este año está más animado. La gente no tiene esa psicosis del año pasado. Ver que al vecino le va bien ayuda para gastar más», comenta Javier Lopetegui, responsable del restaurante 'Aiten Etxe' de Zarautz. Kino Martínez, secretario general de la Asociación de Hostelería de Gipuzkoa, cuenta que «la Semana Grande en San Sebastián ha sido muy buena. Hay mucha gente. De todas formas da la sensación de que hay más personas de las que consumen, quizá por las nuevas formas de competencia con la hostelería como pueden ser las txosnas». Kino añade que «hemos notado que se está recuperando al turista del Estado, en el presupuesto familiar se empieza a considerar de nuevo el turismo». Los franceses, ingleses, belgas y holandeses son los turistas extranjeros que más visitan Gipuzkoa, según diversos hosteleros y responsables de hoteles del territorio. Los madrileños y catalanes son, como en ocasiones anteriores, los visitantes nacionales que más se animan a disfrutar del paisaje vasco. Este estío también se ha registrado un mayor número de andaluces. El pasado verano, el 52% de las personas que se alojaron en hoteles guipuzcoanos eran extranjeras, mientras que el 48% eran turistas nacionales. Este verano se esperan datos parecidos. «Ya ha visitado Goierri gente de treinta países diferentes. Muchos rusos contactan con guías de Donostia desde su país y vienen aquí a pasar el día. Este verano también hemos tenido gente de México, Egipto e incluso de las Islas Mauricio. Además, muchos franceses vienen para practicar senderismo», cuenta Nico Osinalde. Estancia media: dos noches Que el sector turístico guipuzcoano viva una situación desahogada en verano no es motivo de tranquilidad para estos profesionales. Paul Liceaga explica que «con independencia de que en verano se superen las estancias medias en los hoteles, las anuales no suelen superar el 60% de ocupación ni el número medio de noches que son dos». Fran González se muestra de acuerdo con el coordinador de la patronal hotelera y añade que «San Sebastián es una ciudad de paso». La gente suele alojarse alrededor de dos noches en la capital guipuzcoana y luego moverse a otros lugares. Desde Goierri, en cambio, las impresiones son diferentes. «No sé si la palabra es emoción», dice Nico, «pero estamos muy contentos de la pernoctación en los hoteles de Goierri este verano». Hasta hace dos años la mayoría de personas que visitaban esta comarca se alojaban en casas rurales. Este año los hoteles de Goierri tienen la misma ocupación que los de Donostia y Bilbao, alrededor del 80%. La mayoría de turistas contratan el servicio de media pensión. Los hosteleros del lugar han notado que los excursionistas no salen tanto a comer fuera, debido al servicio de media pensión seguramente. Aún y todo, la situación no es negativa. Al igual que los museos y queserías de Goierri, el restaurante 'Arroka Berri' de Hondarribia está triunfando de una manera excepcional. «Normalmente tenemos todo reservado. No hemos notado variaciones en el precio de consumo medio por cliente desde los últimos seis años. Como nosotros no atendemos en terraza tampoco hemos apreciado un descenso de clientela», comenta Jesús Ancisar. «El mal tiempo suele ayudar para cambiar los planes», añade. Y, quién sabe, quizá la lluvia sirva de 'empujoncito' para todos los indecisos que dudan sobre cambiar la playa por un museo o un restaurante.